Una alimentación sana es importante durante todo el año. Pero en invierno este desafío es mayor debido a que los días son más cortos, las temperaturas son más bajas y la variedad de vegetales es menor.Todo esto hace que comer sano no resulte tan sencillo como en otras épocas del año.
Estos son los mejores consejos para mantener una alimentación saludable durante el invierno:
- Come frutas y verduras
Es fundamental no reducir el consumo de frutas y verduras durante los meses más fríos. Estos alimentos nos ayudan a mantener un peso saludable y nos protegen de muchas enfermedades.Puedes comerlas crudas en ensaladas o prepararlas como más te gusten: al horno, hervidas, al vapor o en comidas de olla como sopas, guisos o estofados.
- Bebe suficiente agua
Durante los meses invernales también es importante mantenernos bien hidratados. ¿No sientes sed o no dan ganas de beber agua? Opta por bebidas calientes como caldos e infusiones (siempre sin azúcar). Son excelentes alternativas para mantener un adecuado consumo de líquidos.
- Controla las porciones
A pesar del frío, no es necesario aumentar el consumo de calorías; por lo cual debes controlar el tamaño de las porciones para no caer en excesos.
- Evita el picoteo
En invierno solemos pasar más tiempo en casa y esto, muchas veces, nos lleva a comer a cualquier hora, causando un descontrol en nuestra alimentación.
- Mantén la actividad física
Cuando las temperaturas son más bajas no resulta tan atractivo salir a realizar ejercicio físico, al menos al aire libre. Pero mantener tu nivel de actividad física es muy importante para conservar un buen estado de salud. Adapta tu rutina a esta época del año y, sobre todo, busca oportunidades para moverte todos los días: subir escaleras, limpiar o pasear las mascotas.
El frío no debe ser una excusa para descuidar nuestros hábitos alimentarios. Una alimentación saludable es la mejor estrategia para enfrentar el invierno, ya que nos ayuda a proteger nuestro cuerpo del clima frío y de los virus estacionales.
